¿Qué es un quiste ganglionar?

Un quiste ganglionar, a veces llamado quiste bíblico, es una masa llena de líquido que se encuentra debajo de la piel. Generalmente se forma debido a un desgarro en el tejido que rodea una articulación o un tendón, y crea una hinchazón con forma de saco. Aunque no son malignos, los quistes ganglionares pueden causar molestias, sobre todo si se encuentran cerca de una articulación.

¿Qué causa un quiste ganglionar?

Se desconoce la causa exacta de los quistes ganglionares . Sin embargo, se cree que las lesiones articulares o tendinosas pueden influir. El uso excesivo de la articulación afectada también puede agravar la afección, aumentando potencialmente el tamaño del quiste. Por otro lado, el reposo articular puede ayudar a reducir su tamaño con el tiempo.

Síntomas de los quistes ganglionares

Los quistes ganglionares suelen caracterizarse por una protuberancia visible debajo de la piel, que puede variar en tamaño y forma. Si bien muchos quistes son indoloros, otros pueden causar molestias, especialmente si presionan los nervios. Los síntomas incluyen dolor muscular, sensación de hormigueo e inflamación ocasional. Estos quistes aparecen con mayor frecuencia en las muñecas, las manos, los tobillos y los pies.

¿Cómo se diagnostica un quiste ganglionar?

Los médicos suelen diagnosticar los quistes ganglionares mediante exámenes físicos. La apariencia y la ubicación del bulto suelen ser suficientes para su identificación. En algunos casos, se pueden emplear pruebas de luz o técnicas de imagen como radiografías para descartar afecciones subyacentes, como la artritis.

Opciones de tratamiento para los quistes ganglionares

Medicamento

Los medicamentos pueden ayudar a reducir la hinchazón y aliviar las molestias leves asociadas con los quistes ganglionares.

Aspiración

La aspiración consiste en extraer líquido del quiste con una aguja. Este procedimiento mínimamente invasivo ofrece alivio inmediato, pero no elimina el quiste por completo, lo que significa que los síntomas podrían reaparecer.

Cirugía

Si otros tratamientos no son eficaces o el quiste reaparece, se podría recomendar una cirugía. Conocida como ganglionectomía, este procedimiento ambulatorio extirpa el quiste por completo. La recuperación suele durar de dos a seis semanas, durante las cuales se recomienda a los pacientes seguir estrictamente las pautas de cuidados postoperatorios. 

Después de la cirugía: qué esperar

Después de la cirugía, se suturará y vendará la incisión para prevenir infecciones y proteger la zona. Se podrían recetar analgésicos para las molestias. En el caso de quistes extirpados de la mano o la muñeca, se podría recomendar inicialmente un cabestrillo para minimizar el movimiento y reducir la inflamación. Se recomienda a los pacientes que contacten con su cirujano si experimentan alguna complicación.

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