Los gases son una afección común y a menudo incómoda causada por la acumulación de aire o gases digestivos en el tracto gastrointestinal. Pueden deberse a diversos factores, como la ingestión excesiva de aire, una digestión lenta, dietas ricas en fibra o trastornos digestivos subyacentes. Afortunadamente, cambios sencillos en el estilo de vida, como masticar bien, evitar alimentos que producen gases, mantenerse activo y comer despacio, pueden ayudar a controlar los síntomas. En algunos casos, las molestias causadas por los gases pueden incluso parecerse a un dolor en el pecho, lo que puede confundirse con afecciones más graves como un infarto.
¿Qué es la compresión de gas?
La compresión de gases ocurre cuando el exceso de gases se acumula en los intestinos, lo que altera la digestión normal. Esta acumulación puede causar hinchazón, dolor abdominal, molestias y gorgoteos audibles. Si bien los gases ocasionales son normales, la persistencia o el exceso de gases pueden causar molestias significativas y podrían indicar un problema digestivo subyacente.
Causas comunes de la compresión de gas
Varios factores contribuyen a la retención de gases en el sistema digestivo. Entre ellos se incluyen:
Digestión lenta
Cuando la digestión es lenta, los alimentos permanecen en el intestino más tiempo del necesario, lo que provoca fermentación y mayor producción de gases. Una mala digestión también puede dificultar la absorción de nutrientes, agravando las molestias gastrointestinales.
Tragar exceso de aire (aerofagia)
Comer demasiado rápido, tomar bebidas carbonatadas, masticar chicle o fumar puede introducir aire adicional en el estómago. Si bien parte de este aire se expulsa al eructar, el resto viaja a través de los intestinos, lo que contribuye a la hinchazón y los gases.
Alimentos que producen gases
Ciertos alimentos ricos en fibra, como los frijoles, el brócoli, la col y las lentejas, son conocidos por aumentar la producción de gases. Estos alimentos contienen carbohidratos complejos que las bacterias intestinales fermentan, produciendo gases como subproducto.
Intolerancia a la lactosa
Las personas con deficiencia de la enzima lactasa tienen dificultades para digerir los productos lácteos, lo que provoca la fermentación de la lactosa no digerida en el colon. Este proceso genera exceso de gases, hinchazón y, en ocasiones, diarrea.
Deterioro de la motilidad intestinal
Afecciones como el síndrome del intestino irritable (SII) o el estreñimiento pueden retardar el movimiento intestinal, atrapando gases y causando malestar prolongado.
Dado que la salud digestiva varía de persona a persona, los hábitos alimentarios individuales y las condiciones médicas juegan un papel importante en la retención de gases.
¿Por qué se acumula un exceso de gases en los intestinos?
El gas en el sistema digestivo tiene su origen en dos fuentes principales:
1. Aerofagia (tragar aire)
Comer rápido, beber con pajita, masticar chicle o fumar puede causar una ingesta excesiva de aire. Si bien eructar expulsa parte de este aire, el resto se desplaza por los intestinos y finalmente se expulsa en forma de flatulencia.
2. Fermentación bacteriana en el colon
Ciertos carbohidratos, como azúcares, almidones y fibra, no se digieren completamente en el intestino delgado. Cuando estos compuestos no digeridos llegan al colon, las bacterias intestinales los descomponen, produciendo gases como hidrógeno, dióxido de carbono y metano. Aproximadamente un tercio de las personas también producen metano, lo que puede contribuir a la hinchazón y el malestar.
Cómo aliviar los gases rápidamente
Si los eructos frecuentes o las flatulencias se vuelven molestos, existen varios métodos que pueden ayudar a expulsar los gases atrapados:
- Actividad física (caminar, ejercicio ligero)
- Masaje abdominal (movimientos circulares suaves)
- Hidratación (beber agua o infusiones tibias)
- Hierbas carminativas (té de menta, jengibre, hinojo o comino)
Remedios naturales para el exceso de gases estomacales
Las personas con problemas digestivos crónicos, como el síndrome del intestino irritable o el estreñimiento, suelen sufrir gases persistentes. Entre las soluciones naturales eficaces se incluyen:
- Infusiones (jengibre, anís, manzanilla)
- Terapia de calor (compresas calientes en el abdomen)
- Ejercicios de respiración profunda (para relajar los músculos digestivos)
- Ajustes dietéticos (reducción de alimentos que producen gases)
¿Qué hierbas ayudan con los gases intestinales?
Ciertas plantas tienen propiedades carminativas, lo que significa que ayudan a expulsar gases y a facilitar la digestión. Las opciones más efectivas incluyen:
- Té de menta (relaja los músculos intestinales)
- Té de hinojo (reduce la hinchazón)
- Té de manzanilla (calma la irritación digestiva)
- Té de jengibre (estimula la digestión y reduce las náuseas)
Incorporar estos remedios a las rutinas diarias puede brindar alivio del malestar relacionado con los gases y, al mismo tiempo, promover la salud digestiva general.