Un diagnóstico de cáncer de próstata conlleva un torbellino de conmoción emocional, miedo, confusión y un aluvión de preguntas que parecen exigir respuestas inmediatas. Entre las más urgentes se encuentra una que puede definir la salud futura de un hombre: ¿Necesito cirugía?
La prostatectomía radical , la extirpación completa de la próstata, sigue siendo uno de los tratamientos más comunes y potencialmente curativos para el cáncer de próstata localizado. Sin embargo, no es la única opción ni la opción adecuada para todos los pacientes. Algunos hombres responden bien a la radioterapia. Otros son candidatos a la vigilancia activa. Y, en algunos casos, opciones menos invasivas como el HIFU o las terapias focales pueden ser apropiadas.
Entonces, ¿cómo saber cuándo es el momento de considerar la prostatectomía y cuándo podría ser mejor esperar o buscar otra opción?
Este artículo analiza los factores médicos, emocionales y de estilo de vida clave que influyen en la decisión de someterse a una prostatectomía. Porque la elección correcta del tratamiento no se trata solo del cáncer. Se trata de usted .
No todos los diagnósticos son iguales
El cáncer de próstata es único entre los cánceres por un aspecto importante: crece lentamente en muchos hombres . Por eso, no todos los diagnósticos requieren un tratamiento inmediato o agresivo. De hecho, para algunos hombres, especialmente aquellos con tumores pequeños y no agresivos, el mejor enfoque inicial podría ser no hacer nada , salvo un seguimiento cuidadoso.
Es probable que su urólogo clasifique su cáncer utilizando varios factores clave:
- Nivel de PSA (antígeno prostático específico)
- Puntuación de Gleason (qué tan agresivas parecen las células cancerosas)
- Estadio del tumor (hasta dónde se ha propagado el cáncer)
- Resultados de imágenes (resonancia magnética, tomografía computarizada o gammagrafía ósea)
Estos indicadores ayudan a definir el nivel de riesgo de padecer cáncer:
- Riesgo bajo : PSA <10, Gleason 6 o inferior, tumor confinado a la próstata
- Riesgo intermedio : PSA 10-20 o Gleason 7
- Alto riesgo : PSA >20, Gleason 8-10 o cáncer fuera de la próstata
Cada categoría de riesgo abre diferentes puertas en lo que respecta al tratamiento y la prostatectomía es la más comúnmente recomendada para los casos de riesgo intermedio y alto.
¿Cuándo es la prostatectomía la opción preferida?
Si bien las decisiones sobre el tratamiento siempre deben ser personalizadas, ciertos criterios hacen que la prostatectomía radical tenga más probabilidades de ser el mejor curso de acción:
1. El cáncer está localizado o localmente avanzado
Si el cáncer está confinado a la próstata o recién ha comenzado a crecer en el tejido cercano (por ejemplo, las vesículas seminales), la cirugía puede ofrecer la mejor posibilidad de extirpación completa y curación a largo plazo.
2. Eres relativamente joven y saludable
La prostatectomía es una cirugía mayor. Es más adecuada para pacientes menores de 70 años (aunque los hombres mayores con buena salud también pueden ser candidatos). Cuanto mayor sea su expectativa de vida, mayor será el beneficio de extirpar el cáncer en lugar de monitorearlo o irradiarlo.
3. Deseas un tratamiento único y definitivo
Algunos hombres se sienten ansiosos por los efectos secundarios de la terapia hormonal a largo plazo o la radioterapia. Otros prefieren la certeza de extirpar físicamente el cáncer. Para estos pacientes, la prostatectomía puede brindar tranquilidad y un resultado claro del tratamiento.
4. Tienes características de alto riesgo
Si su cáncer es agresivo, con PSA alto, puntuación de Gleason alta o crecimiento rápido, la cirugía podría ser la única opción curativa. Además, permite un muestreo exhaustivo de los ganglios linfáticos circundantes, lo que ayuda a determinar la estadificación.
5. Usted es un buen candidato para la cirugía de conservación de nervios
Las técnicas modernas de prostatectomía buscan preservar los nervios que controlan la función eréctil y la continencia urinaria. Si el cáncer no invade estas áreas, el cirujano podría preservarlas, mejorando así la calidad de vida después de la cirugía.
¿Cuándo la prostatectomía podría no ser la opción correcta?
La cirugía no es la opción adecuada para todos. De hecho, muchos hombres pueden posponer o incluso evitar la prostatectomía sin problemas.
1. Su cáncer es de muy bajo riesgo
Los hombres con tumores Gleason 6, PSA bajo y tumores pequeños pueden tener buena evolución con vigilancia activa . Esto implica monitoreo regular (PSA, imágenes, biopsia ocasional) sin intervención inmediata.
2. Tiene afecciones médicas importantes
Si padece una enfermedad cardíaca, diabetes o está frágil debido a la edad u otras enfermedades, el estrés de la cirugía y la anestesia puede suponer más riesgos que beneficios. En tales casos, la radioterapia o incluso la espera vigilante pueden ser más seguras.
3. Prefieres un enfoque no quirúrgico
Algunos pacientes simplemente no desean la cirugía por razones personales, culturales o emocionales. Es válido. La radioterapia, la braquiterapia (implantación de semillas) o los tratamientos focales como el HIFU pueden ofrecer excelentes alternativas con diferentes perfiles de efectos secundarios.
La cirugía también es una decisión mental
El camino hacia la prostatectomía no solo se basa en resultados de laboratorio y resonancias magnéticas. También se define por la preparación emocional del paciente.
- ¿Está preparado para un período de recuperación que podría incluir incontinencia temporal o disfunción eréctil?
- ¿Tiene apoyo en casa durante su recuperación?
- ¿Estás mentalmente preparado para pasar por una operación importante?
Para muchos hombres, el impacto emocional del cáncer de próstata es más profundo de lo que esperaban. Una relación sólida entre médico y paciente, la terapia y la comunicación abierta con sus seres queridos son clave para superar este proceso.
Cómo funciona el procedimiento
Si usted y su cirujano deciden seguir adelante con la prostatectomía, aquí le presentamos una breve descripción de lo que puede esperar:
- Tipo de procedimiento : Puede ser abierto (incisión tradicional), laparoscópico o asistido por robot.
- Anestesia : Se requiere anestesia general.
- Duración : 2 a 4 horas
- Estancia en el hospital : generalmente de 1 a 3 noches
- Catéter : se usa durante 7 a 14 días después de la cirugía.
- Tiempo de recuperación : la mayoría de los hombres vuelven a la actividad ligera en 2 a 3 semanas; la recuperación completa puede tardar entre 6 y 8 semanas.
Centros de vanguardia como el Hospital Erdem de Estambul ofrecen tanto prostatectomía radical abierta como técnicas robóticas/laparoscópicas , dirigidas por urólogos experimentados como el Prof. Dr. Necmettin Atsü . El enfoque de atención integral del hospital garantiza que los pacientes internacionales reciban apoyo coordinado antes, durante y después de la cirugía.
Preguntas clave que debe hacerse antes de elegir la cirugía
Antes de tomar su decisión, pregunte a su urólogo lo siguiente:
- ¿Cuál es mi nivel de riesgo de cáncer?
- ¿Realizará una cirugía para preservar los nervios?
- ¿Cuáles son los riesgos de incontinencia o disfunción eréctil en mi caso?
- ¿Necesito tratamiento adicional después de la cirugía?
- ¿Cuáles son mis opciones no quirúrgicas y cómo se comparan sus resultados?
El objetivo no es sólo obtener respuestas, sino sentirse seguro de que su elección refleja sus valores personales , no sólo las pautas clínicas.
¿Qué viene después?
Una vez que decida someterse a una prostatectomía, comienza la preparación. Esta incluye pruebas preoperatorias, la suspensión de ciertos medicamentos y ajustes en su estilo de vida. Después de la cirugía, pasará por un período de recuperación que incluye:
- Manejo del catéter
- Terapia del suelo pélvico para la continencia
- Retorno gradual a la actividad
- Prueba de PSA cada 3 a 6 meses
Emocionalmente, también puede atravesar etapas de vulnerabilidad, frustración y renovación. Muchos hombres informan que solo meses después, cuando recuperan la energía y su PSA se mantiene en cero, sienten que el peso del cáncer se ha aliviado .
Es tu cuerpo, tu cáncer, tu decisión

La decisión de someterse a una prostatectomía es una de las decisiones médicas más personales que un hombre puede afrontar. Requiere valentía, claridad y, sobre todo, información .
Al trabajar en estrecha colaboración con su equipo de atención médica, hacer preguntas difíciles y escuchar sus propios instintos, estará mejor preparado para tomar una decisión que favorezca no solo su salud física, sino también su tranquilidad.
En el Hospital Erdem , los pacientes no son tratados como números, sino como individuos con historias, familias y un futuro que vale la pena proteger. Ya sea que esté considerando una prostatectomía, explorando otras opciones de tratamiento o simplemente buscando una segunda opinión, el primer paso siempre es el mismo: infórmese, sea proactivo y no demore la conversación .