La prostatectomía es un procedimiento quirúrgico que consiste en la extirpación parcial o total de la próstata. La próstata es una pequeña glándula ubicada debajo de la vejiga en los hombres y desempeña un papel en la producción de líquido seminal. La prostatectomía se realiza para tratar afecciones como el cáncer de próstata, la hiperplasia prostática benigna (HPB) y la prostatitis crónica.
Tipos de prostatectomía
Los procedimientos de prostatectomía se clasifican según la extensión de la extirpación y el abordaje utilizado: la prostatectomía radical implica la extirpación completa de la glándula prostática y los tejidos circundantes, y se utiliza a menudo para tratar el cáncer de próstata. La prostatectomía simple o parcial extirpa solo la parte de la próstata que causa la obstrucción urinaria, comúnmente utilizada para la HBP. La resección transuretral de la próstata (RTUP) extirpa la parte interna de la próstata a través de la uretra, un abordaje menos invasivo para la HBP.
¿Por qué se realiza la prostatectomía?
La prostatectomía se realiza por varias razones, entre ellas: el tratamiento del cáncer de próstata mediante la extirpación de tejido canceroso; el alivio de los síntomas urinarios causados por el agrandamiento de la próstata (HPB); y el tratamiento de la prostatitis crónica cuando otros tratamientos resultan ineficaces.
Preparación para la prostatectomía
La preparación para una prostatectomía implica varios pasos para garantizar resultados óptimos: Se realiza una evaluación médica exhaustiva, que incluye análisis de sangre y estudios de imagen, para evaluar el estado general de salud. Es fundamental conversar con el cirujano sobre el procedimiento, los resultados esperados y los posibles riesgos. Es posible que sea necesario suspender temporalmente medicamentos como los anticoagulantes para reducir los riesgos quirúrgicos. Se aconseja a los pacientes que sigan las instrucciones preoperatorias, incluido el ayuno antes del procedimiento. Se recomiendan cambios en el estilo de vida, como dejar de fumar y mantener la actividad física, para facilitar la recuperación. Se debe contar con un sistema de apoyo para el período postoperatorio.
Resultados y recuperación
Los resultados de la prostatectomía dependen del tipo y el propósito del procedimiento. La prostatectomía robótica ofrece beneficios como menos dolor, menor pérdida de sangre y una recuperación más rápida en comparación con los métodos tradicionales. La mayoría de los pacientes pueden retomar sus actividades normales en cuatro semanas, con limitaciones menores. Para el tratamiento de la HBP, la prostatectomía simple proporciona un alivio a largo plazo de los síntomas urinarios. Las complicaciones graves son poco frecuentes y, por lo general, no es necesario un tratamiento de seguimiento.
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